CONSEJOS PARA APACIGUAR EL CALOR
mayo 20, 2013 en Climatización, Energía, Enfriamiento por La Casa Econológica
Después de este largo invierno, por fin ha llegado la primavera y de aquí a nada ya estaremos en verano. Por eso, para ir preparándonos, voy a daros unos consejos básicos para evitar en lo posible los sofocos estivales dentro de casa.
Ventila la casa
En casa tenemos multitud de electrodomésticos que, de manera indirecta generan calor, el televisor, la iluminación…por eso conviene abrir la casa y permitir que ese calor se disipe. Las mejores horas para ventilar en verano son, evidentemente, cuando más fresquito hace: antes del alba. Hora a la que generalmente estamos durmiendo, así que o lo hacemos de noche (también podemos dejar las ventanas abiertas durante toda la noche, dependerá del tipo de vecinos que tengamos ) o a primera hora de la mañana.
Evita la entrada directa del sol en casa
Por mucho que nos guste estar tumbados al sol en la playita, no es recomendable dejar entrar al mediodía al sol en nuestro salón, es más que probable que en vez de convertirse en un solárium lo haga en un invernadero. Para evitar esto y seguir gozando de una buena visibilidad hay varias opciones: colgar cortinas claras, bajar la persiana a medias o poner toldos.
Desviste la casa
Alfombras y tapices evitan que el calor se “escape” por paredes y suelo en invierno. Y esto es justamente lo que queremos que pase en verano, que todo el calor se vaya, y si puede ser corriendo, mejor.
Usa tejidos ligeros
Igual que en verano cambiamos la ropa que nos ponemos, pasamos de la lana al algodón o al lino porque son tejidos más fresquitos. Cubre camas, sofás y sillones con telas de estos materiales, la sensación térmica proporcionada será mejor y evitarán que sudemos cuando estemos tumbados sobre ellos.
Minimiza el uso de aparatos eléctricos
Como ya hemos mencionado, los aparatos eléctricos desprenden calor, sólo tienes que poner la mano sobre un ordenador que leva un rato encendido para comprobarlo. Por eso, cuanto menos tiempo innecesario estén encendidos, mejor, menos calor y más ahorro en la factura de la luz.
Con esto podemos, sin ningún tipo de gasto extraordinario, aumentar el confort térmico de nuestra casa, pero en la mayoría de los casos no será suficiente y habrá que recurrir a elementos refrigerantes tales como aire acondicionado, termobomba o ventiladores. En posteriores post, y antes de que el sopor del verano se nos eche encima, iremos desvelando cuáles son los más convenientes en cada caso, con una capacidad de enfriamiento mayor y por supuesto, los más rentables económicamente.
Comentarios recientes